En mi sueño... 
 Navegaba a bordo de tu voz 
en un profundo mar de canciones, 
al arribar a la orilla de tu cuerpo, 
puerto seguro, hogar amado, 
sepulte en tu piel (en tu cuerpo), 
el palpitante amor, 
un tesoro de besos y caricias, 
 la devoción de mi alma enamorada. 

Al despertar me miro en tus ojos 
y al rozar tus labios sé que en ti
está seguro aquel tesoro.

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